Dios ha hecho que vuestras viviendas sean para vosotros un lugar de sosiego. ha puesto a vuestra disposición el cuero de los rebaños para que hagáis con él vuestras tiendas, las cuales son fáciles de transportar los días que viajáis o acampáis. También de su lana, pelo y crin hacéis utensilios y alfombras con las que hacéis confortable esta vida.