y quiénes los hipócritas, a quienes se les dijo: “Combatid por la causa de Dios o al menos defendeos”. Respondieron [mintiendo]: “Si hubiéramos sabido que habría combate, os hubiéramos seguido”. Ese día estuvieron más cerca de la incredulidad que de la fe, porque manifestaban con sus bocas lo que no había en sus corazones. Pero Dios bien sabe lo que ocultaban.