Cuando salgan en busca del botín1, quienes no participaron [de la expedición a La Meca] dirán: “Dejadnos participar de la expedición”. Pretenden cambiar el designio de Dios2. Diles [¡Oh, Muhámmad!]: “No participaréis de ella, pues así lo ha decretado Dios”. Entonces responderán: “En realidad nos tienen envidia”, pero es poco lo que comprenden.